Presas centradas, presas con gravedad y presas con acción
PRESAS CENTRADAS
Realizan una simetría en torno al eje longitudinal que, en general se confunde con el eje del antebrazo.
Esto es evidente en el caso de:
La batuta del director de orquesta: que no
hace más que prolongar la mano y representa una extrapolación del dedo índice
en cuanto a su función señaladora.
También es bastante claro en la presa de un tenedor o de un cuchillo que no hacen más que prolongar la mano distalmente.
En
cualquier caso, el objeto de norma alargada se coge con firmeza mediante una
presa palmar donde intervienen el pulgar y los últimos tres dedos, el dedo índice,
en este caso, desempeña una función orientativa indispensable para dirigir el
utensilio.
Las presas centradas o direccionales son muy útiles;
requieren la integridad de la flexión de los tres últimos dedos, la extensión
completa del dedo índice cuyos músculos flexores deben ser eficaces, y un
mínimo de oposición del pulgar para el que la flexión de la articulación interfalángica
no es indispensable.
PRESAS CON LA GRAVEDAD
Existen otros tipos de prensión en los que la acción de la gravedad
es indispensable.
Si la gravedad es nula, los músculos se atrofian, si es muy grande, como en el caso del planeta Júpiter, los músculos deben reforzarse.
En
estas presas que la gravedad ayuda, la mano sirve de soporte, como cuando se
sujeta una bandeja, lo que supone que puede aplanarse, con la palma de la mano
horizontal, mirando hacia arriba y por lo tanto, en máxima supinación y sin los
dedos en forma de gancho, lo que está en la base de la prueba del camarero o
que puede transformarse en un trípode por debajo del objeto que debe sujetar.
Gracias a la gravedad, la mano también puede comportarse como una cuchara que contiene granos harina o un líquido.
El hueco de la palma de la mano se prolonga por el de los dedos aducidos al máximo por la acción de los músculos interóseos palmares para evitar las posibles fugas.
El pulgar es muy
importante en esta acción, cierra la corredera palmar por fuera: en semiflexión,
se aproxima al segundo metacarpiano y a la primera falange del dedo índice bajo
la acción del músculo aductor del pulgar.
La
aproximación de las dos manos huecas en forma de dos semicuencos unidos por su
borde cubital puede constituir una cavidad mucho más amplia, en un gesto de
ofrenda.
Todos estos tipos de prensión a modo de sostén necesitan que la supinación esté integra: de hecho, sin ella, la palma de la mano, única parte de la mano capaz de constituir una pared cóncava, no puede orientarse hacia arriba, ya que no existe posibilidad alguna de compensación de la supinación por parte del hombro.
Presa de una taza con
tres dedos utiliza la gravedad puesto que su circunferencia queda sujeta entre
dos topes, constituidos por el pulgar y el dedo corazón, además de un gancho
formado por el dedo índice. Esta presa necesita una gran estabilidad del pulgar
y del dedo corazón, así como la integridad del músculo flexor profundo de los
dedos del dedo índice cuya tercera falange sostiene el reborde de la taza. El músculo
aductor corto del pulgar también es imprescindible.
Las
presas en forma de gancho con uno o varios dedos, como cuando se lleva un cubo
o una maleta, o incluso en el caso de engancharse a los salientes de una pared
rocosa, también utilizan la acción de la gravcdad, oponiéndose, y necesitan
también la integridad de los músculos flexores y, en especial, del músculo flexor
profundo de los dedos, que puede romperse accidentalmente en algunas presas
empleadas por los alpinistas.
PRENSAS CON ACCIÓN
La
mano también es capaz de actuar cogiendo. Es lo que se denomina presas con
acción (PCA) o de modo más sencillo presas-acción.
Algunas
de estas acciones son elementales como por ejemplo lanzar una peonza mediante
una presa pulgar-índice tangencial, o también lanzar una canica mediante un
impulso brusco de la segunda falange del pulgar por acción del músculo extensor
largo del pulgar, la canica sujeta previamente en la concavidad del dedo índice
totalmente flexionado por acción del músculo flexor profundo de los dedos.
Existen otras acciones más complejas, donde la mano realiza una acción refleja sobre sí misma. En este caso, el objeto sujeto por una parte de la mano sufre una acción que procede de otra parte. Estas presas -acción donde la mano actúa sobre sí misma son innumerables; se pueden tomar como ejemplo:
Encender
un mechero
Se parece bastante a la acción de lanzar una canica, el mechero sujeto con la concavidad del dedo índice y de los otros últimos dedos mientras que el pulgar en forma de gancho actúa sobre el mecanismo por acción del músculo flexor largo del pulgar y de los músculos tenares
Apretar el resorte de
un frasco de aerosol
Esta
vez, el objeto está sujeto por un presa palmar y la flexión del dedo índice en
forma de gancho es la que actúa sobre tapón por acción del músculo flexor profundo
de los dedos.
Cortar con tijeras
Las anillas se ensartan, por una parte, por el pulgar y, por otra por el dedo corazón o el dedo anular. La acción del pulgar es principalmente motora tanto para cerrar las tijeras gracias a los músculos tenares, como para abrirlas por el músculo extensor largo del pulgar.
La
separación de las anillas puede, cuando se repite como un acto profesional,
provocar la ruptura del músculo extensor largo del pulgar. El dedo índice
orienta las tijeras, lo que constituye un ejemplo de presa-acción orientadora.
Comer
con palillos chinos
Uno
de los palillos permanece fijo, bloqueado por el dedo anular en la comisura del
pulgar, y el otro palillo móvil mediante una presa tridigital pulgar-índice-corazón,
conforma una pinza con el primero. Esto constituye, sin duda alguna, una prueba
excelente de habilidad manual para un Europeo, ya que los Asiáticos lo realizan
de forma inconsciente desde su más temprana edad.
Hacer nudos con una
sola mano
Se
trata de una prueba de habilidad manual que supone la accíón independiente y
coordinada de dos pinzas bidigitales, una índice-corazón, que actúa de presa
latero-lateral, y la otra pulgar-anular, que actúa de presa pulgodigital aunque
muy poco utilizada.
Los cirujanos emplean un método muy parecido para hacer los nudos con una sola mano. Estas acciones múltiples con una sola mano son muy frecuentes en los prestidigitadores y los ilusionistas, cuya destreza, perfeccionada constantemente con ejercicios cotidianos, es netamente superior a la media.
Mano
izquierda de un violinista
Realiza
una presa-acción móvil: el pulgar sujeta el "mango" del violín y, aún
desplazándose, sirve de contra-apoyo a la acción de los otros cuatro dedos que,
al tocar las cuerdas, forman las notas.
Esta presión que se ejerce sobre la cuerda tiene que ser a la vez precisa, firme y modulada para así conseguir la vibración. Estas acciones tan complejas son el resultado de un largo aprendizaje y deben mantenerse y perfeccionarse con ejercicios cotidianos.
Cada
lector puede descubrir por sí mismo la infinita variedad de presas-acción que
representan la actividad más colaborada de la mano en plena posesión de su
integridad funcional y que pueden servir de pruebas funcionales.
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